Minas Tirith en Llamas...

  Se ha abierto abierto una brecha en el primer nivel de Minas Tirith...y en el segundo...y en el tercero. Mi ciudad arde en todos sus niveles y los blancos bloques de piedra blanca que comformaban sus muros y edificios, aquellos que refulgían con la luz del Sol y brillaban con la luz de la Luna, yacen ahora ennegrecidos y hechos pedazos en trozos irregulares...ruinas altaneras de épocas mejores. Mi ciudad arde y el Viento del Norte arrastra sus cenizas, cada vez más numerosas, sobre los escombros que mi guerra civil, tu asalto y tu posterior masacre han dejado como resultado.

 

   Gondor pidió auxilio...¿He podido hacer algo contra esto? Quizás sí, quizás no. Lo único que sé es que no quedarán vestigios de mi grandeza y, cuando el tiempo pase y las eras cambien...cuando el cielo vuelva a ser normal y las personas se atrevan a acercarse a las ruinas, las encontrarán cubiertas de maleza. Un muro aquí, un impacto de catapulta allá, un tejado al otro lado y los bloques de piedra a sus pies. Aquél que se atreva a ascender y a pasar la barrera encontrará la verdadera desolación: la ciudad o lo que de ella quedó en pie. Viejas calzadas rotas y levantadas, recuerdos de la guerra y de la batalla librada, casas con las puertas derribadas y hollín y negrura por doquier.

  Más arriba aún, el palacio derruido jamás volverá a acoger a nadie en sus salones de mármol y alabastro. Nadie podrá disfrutar de los jardines que a sus pies se extendían ni disfrutar de la visión de los amantes allí recostados. La Torre Blanca no volverá a contemplar el cielo ni las estrellas. No quiero ni Sol, ni Luna, ni rayos, ni nubes ni sus formas...total, la Torre cayó, qué más da ahora. Cada impacto hizo mella en su estructura, la cual no era débil, pero debía ser cuidada. Mandaste a los ejércitos lejos, te advertí y no me hiciste caso, a tierras lejanas y la dejamos sin protección. Este es el resultado: una ciudad desprotegida a la cual es sencillo golpear. Total, no importa, si de esta cae ya se levantará y si no se levanta total, por un impacto más no creo que se caiga. Zas, ciudad destruida. Tarde para regresar, ya no hay nada que salvar...y lo peor, esque sigues machacando sus cimientos. ¿Quieres verla destruida del todo y que ni siquiera su polvo quede? ¿Tanto odio me guardas que eres incapaz de seguir sacando espadas y de ir clavándolas en los restos que quedan de mí y en los soldados que puedo sacar? Lo peor esque ellos van desarmados...y tú los asesinas sin piedad.

  Y si aún se atreven a subir más, a adentrarse en las ruinas de palacio, le descubrirán a él sentado en el trono negro. Quizás les mire, quizás no. Viste de negro y llora en silencio. Llora por lo que perdió y llora por lo que va a perder. Ha visto la destrucción de todos y cada uno de los pilares que aguantaban su ciudad, su refugio, su coraza al corazón. Sostiene en sus manos un colgante, un corazón y una espada. Pero que eso no os engañe, no os acerquéis. Por ahora, solo unos pocos poseen el salvoconducto para la oscuridad que le rodea. No quiere hacer daño, jamás lo quiso pero fue acusado, juzgado y condenado por ello.

  No le provoquéis...solo quiere pensar y resurgir. Pobre inmortal iluso que derribaron tu palacio de ideales, que te enamoraste de luz cuando pertenecías a la oscuridad y, cuando por fin alcanzaste la luz...el arsenal que guardaba la oscuridad de otros reventó por todos los lados y en todas direcciones y, la luz que conseguiste, se extingió como un susurro extingue una vela. Pobre iluso, no sirve para amar, no sirve para hacer feliz...ha sido el peor rey y general del mundo. Ha masacrado, herido y destruido sin piedad. Vaya, eso no estaba recogido en los anales de la historia de la biblioteca. En parte, no falta razón, solo tuvo afinidad con la oscuridad y a ella pertenece...o eso le han hecho creer.

  Reconstruirá la ciudad y Minas Tirith volverá a ser lo que fue. Un bastión de piedra blanca que refulge con la luz del día y que brilla con la noche. ¿Cuánto tiempo tardará? Lo ignoro y no me importa. ¿Cómo lo hará? Sólo él lo sabe. Se apoyará en los aliados que le quedan y en aquellos que quieran brindarle su apoyo. ¿Reconstruirá el palacio y la Torre? En algún lugar deben reposar su corazón y su mente...la guerra civil ha sido larga.

  Y lo más importante, ¿abrirá de nuevo sus puertas? NO.

  No por ahora...no hasta que todo vuelva a estar en su sitio por su propio pie. Apoyar la reconstrucción en otros acarrea que los pilares, al romperse, derrumben todo lo que había encima. Esta vez la reconstruiré yo solo...y Minas Tirith resurgirá aún más esplendorosa que nunca. O eso espero... Por ahora, me retiraré con los elfos. Ellos siempre fueron mis hermanos y no me juzgarán...me recibirán con los brazos abiertos y me dejarán reposar en sus bosques mientras recompongo mi mente y los pedazos de algo rojo que había en mi pecho. ''Algo'' que te has obstinado en destruir a base de insultarme y de degradarme.

  Por su parte, en los desolados salones de palacio resuena el rodar de una corona por los suelos...se ve el refulgir escarlata de una espada teñida de rojo...se oyen los lamentos por la injusticia de los ataques...se sienten la ira y la decepción.

Frase Final:

''Por fin el Sol eclipsó a la Luna, por fin ella ya no es obstáculo para amores velados y obligados a quedar guardados en cajones. Por fin puede la nube reunirse con su hermoso Sol, con el cual compartió sus lágrimas y sus pesares. Aquél al que defendió con toda su fuerza y su determinación... La Luna debió darse cuenta antes...y si la nube se dio cuenta ahora de lo que ''quería'', ha llegado tarde, el eclipse comenzó hace mucho. Yo, por mi parte, comprimiré tu parte y ahí quedará''.

''Aunque Recuerda 

Nunca habrá mañanas sin Sol,

al igual que la Luna no faltará a su noche.

Pero días sin nubes, al año, hay muchos

y los astros, por suerte o por desgracia,

somos eternos''.

Earnur.